Tipos de mosquiteras: guía para elegir las mejores para tu casa

Con la llegada del buen tiempo se agradece abrir la ventana para dejar que entre el aire al interior de nuestra casa. Si, además, tenemos la suerte de estar cerca de una zona verde, el frescor a última hora de la tarde es más que bienvenido cuando las temperaturas han sido muy altas durante el día.

El inconveniente es que, mientras disfrutas del momento, empiezas a oír un sonido inconfundible: el zumbido de un mosquito en busca de algo para cenar. Para evitar llevarte un picotazo, no es necesario que te resignes a cerrar la ventana. Instalar mosquiteras te permitirá mantenerte fuera de su alcance sin renunciar al mejor momento del día.

Pero ¿por dónde empezar? ¿Qué es exactamente una mosquitera y cuál es la mejor opción? Relájate, a continuación, te damos todas las claves.

Qué es una mosquitera

Las mosquiteras son un dispositivo que se adapta a la ventana para impedir que los insectos accedan al interior. En definitiva, la protección ideal para los que más sufren las picaduras durante los meses de verano.

La clave para que cumplan su función es la tela mosquitera. Para saber si ofrece la protección adecuada, se debe consultar la densidad de la malla, que debe tener, como mínimo, 156 agujeros por cada pulgada. Cuanto más densa sea, es decir, cuantos más orificios tenga, la protección será mayor.

Tipos de mosquiteras según su material

Las mosquiteras pueden clasificarse dependiendo del material con el que está fabricada la malla que impide el paso de los insectos.

Mosquiteras de poliéster

Son las que más se suelen instalar actualmente, ya que son fáciles de mantener, ligeras, flexibles y, además, no son muy caras. En definitiva, no difieren mucho de una tela, por lo que la parte negativa es que son más propensas a roturas.

Su composición hace que el aire pueda acceder al interior sin problema, pero no así los insectos ni otras partículas como el polen.

Mosquiteras de fibra de vidrio

Al contrario de las anteriores, son más resistentes y, también, más rígidas y ligeramente más caras.

Suelen utilizarse en la fabricación de mosquiteras fijas o enrollables, ya que su dureza hace que no sean tan adecuadas para los otros modelos.

Mosquiteras de acero inoxidable

Son la opción adecuada para viviendas en entornos rurales o en el campo, ya que no solo impiden el paso de los insectos, sino que también evitan el acceso de los roedores y otros animales pequeños que puedan encontrarse en los alrededores de la casa.

Tipos de mosquiteras según su forma de apertura

Existen diferentes clases de mosquiteras dependiendo de la forma en que se instalan en la ventana o la manera en que pueden retirarse.

Mosquiteras fijas

Son las más sencillas, ya que no necesitan mecanismos de cierre o de apertura, y habitualmente se instalan en ventanas. Una vez que se han colocado, la única forma de retirarlas es desinstalándolas del todo.

Las partes de una mosquitera fija son:

Mosquiteras correderas

Por su diseño, deben instalarse en ventanas correderas, ya que tienen que encajarse en el mismo carril. Es un proceso muy fácil que permite colocarlas en poco tiempo y sin necesidad de herramientas específicas.

Son muy similares a las fijas, pero pueden deslizarse para retirarlas cuando sea necesario. Sus componentes principales son:

• Un cuadro de aluminio de sujeción.
• 4 escuadras, las 2 inferiores con rodamientos para que puedan deslizarse por los raíles.
• Tela mosquitera.

Mosquiteras plisadas

Su apertura es similar a la de las correderas, ya que se retiran hacia un lado de la ventana. La diferencia es que, en este caso, se doblan sobre sí mismas como un acordeón siguiendo el patrón marcado por las guías verticales. Gracias a este sistema, quedan ocultas en un lateral, por lo que se pueden instalar también en puertas de paso siempre y cuando el rail esté oculto en el suelo.

Las mosquiteras plisadas constan de:

• Un marco de sujeción.
• Varias guías de plegado, dependiendo del tamaño.
• 4 escuadras.
• 2 rodamientos.
• Tejido de malla.

Mosquiteras enrollables

El mecanismo de uso de este tipo de mosquiteras es similar al de una persiana: se coloca un cajón en la parte superior de la ventana donde la malla se enrolla y desenrolla cuando se sube o baja.

Resulta el modelo más cómodo, ya que desaparecen por completo cuando no son necesarias y no interfieren para abrir la ventana.

Instalarlas resulta más complicado, ya que requiere acceder al tambor y fijar un nuevo dispositivo. No deben faltar las siguientes piezas:

• Una caja en la que se enrosca la tela.
• 2 guías laterales que facilitan el movimiento de la malla.
• Un muelle recogedor.
• Un carrete donde se enrolla el tejido.

Mosquiteras extensibles

Son mosquiteras que no quedan instaladas en la ventana y que podríamos definir como portátiles. Al modificarse su tamaño, se adaptan fácilmente a diferentes dimensiones, aunque hay que tener claro que no cubrirán el hueco por completo.

Para colocarlas, simplemente hay que encajarlas en las guías de la persiana. Una vez fijas, se baja la persiana para que tape el resto de la ventana.

Su mecanismo es muy sencillo y consta de:

• Un marco grande con 4 perfiles.
• Un cuadro más pequeño para la hoja de menor tamaño que permite agrandar la mosquitera.
• 8 escuadras.
• Felpudo para las guías correderas.
• Tejido.

Mosquiteras abatibles

Poner una mosquitera de tipo abatible en una ventana o una puerta supone colocar una segunda hoja, también con bisagras, que se abre, normalmente, hacia fuera.

Este tipo de sistema se compone de:

• Un marco similar al de todas las puertas y ventanas.
• 4 escuadras.
• Las bisagras necesarias en función del tamaño de la hoja.
• Tela de malla.

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Seguro que esta guía te ha ayudado a decidirte por la mosquitera que quieres poner en tu casa. O puede que te vayan bien modelos diferentes para distintas estancias. ¡Perfecto! Este verano, ningún insecto se colará en tu vivienda mientras estás desprevenido.

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