Calefacción de leña: cómo funciona, ventajas e inconvenientes

La calefacción de leña constituye una de las opciones más tradicionales para calentar el hogar. De hecho, durante los últimos años, ha vuelto a ganar relevancia hasta consolidarse como alternativa a los radiadores. Pero ¿cómo funciona? En este artículo te hacemos un repaso por su funcionamiento, así como por sus ventajas y desventajas.

¿Cómo funciona la calefacción de leña?

Generalmente, se considera que las calderas de leña funcionan por el calor que produce el fuego. Te sorprenderá saber que esta es una falsa creencia. La realidad demuestra que el proceso es el mismo, pero tiene matices importantes:

- Cuando el fuego quema el combustible (la madera), esta emana gases.

- Los gases se encuentran a temperaturas muy elevadas, por lo que salen de la estufa.

- Al mezclarse con el ambiente, suben la temperatura de la estancia.

Para llevar a cabo su labor, estos dispositivos incorporan una serie de elementos:

- El revestimiento está hecho de acero, el cual posee una óptima conducción térmica.

- Sus tubos o rejillas facilitan la salida del aire, que se dirige a la parte superior de la habitación.

- Muchas incluyen un sistema llamado intersticio para que el aire se caliente más rápido.

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Calderas de leña y radiadores: ¿qué se necesita?

La calefacción de leña y los radiadores pueden conectarse. Este es uno de los tipos de calefacción que tienen un mayor potencial para tu hogar. Se precisa:

- Válvula de descarga térmica: Permite expulsar la energía.

- Bomba circuladora: Impulsa el vapor de la leña hacia el radiador.

- Purgador automático: Limpia el aire y lo mantiene a una temperatura estable.

- Filtros: Funcionan como las rejillas para posibilitar el paso del aire.

- Termostato: Está incorporado en el radiador para controlar los grados.

Con lo anterior, puedes tener un sistema de calefacción centralizada en tu casa. Este funciona de la siguiente manera (tomando como referencia una vivienda unifamiliar):

- El calor se genera en la caldera y pasa rápidamente al radiador.

- Una vez en este, se expande hacia el sistema de conductos.

- Mediante las rejillas y tubos de ventilación, llega a las estancias.

Precio de la calefacción de leña: ¿cuánto cuesta la instalación y cuánto se gasta al mes?

Como has visto, hay múltiples formas de incorporar la calefacción de leña a tu vivienda. A continuación, te mostramos el coste que puede suponer su instalación en un hogar unifamiliar.

En primer lugar, el precio de una caldera de leña puede oscilar los 1700 €:

- Partimos de un modelo estándar, es decir, de gama media.

- Un técnico especialista en calefacción puede cobrar unos 700 € si es de gama baja (formato menos complejo).

- En cambio, la cifra puede ascender a los 3000 € si es de gama alta.

Por otro lado, la calefacción centralizada (leña y radiador, como veíamos antes) puede costar unos 15 000 €:

- Esta cifra incluye tanto los dos equipos como su instalación.

- Si la vivienda es de gran tamaño, puede ascender hasta los 40 000 €.

- Esta inversión se suele recuperar a medio plazo por el consumo eléctrico más eficiente.

Con respecto al gasto mensual, este suele rondar una media de 40 €:

- Esta cifra está basada en un consumo de 4 - 5 horas al día.

- Se incluye el gasto eléctrico (eficiencia de hasta un 80 %).

- Depende también de los tipos de leña para estufa.

- El roble o el olivo son más asequibles que la encina o el pino.

Ventajas e inconvenientes de la calefacción de leña

Sin duda, este sistema ofrece numerosas ventajas que puedes aprovechar en tu casa:

- Es una alternativa segura, pues no involucra gas a presión.

- Presenta un potencial calorífico más elevado.

- Es posible aprovechar el calor residual al apagarla.

- Su combustible es más barato (15 - 20 € mensuales).

- Puede ser controlada mediante un cronómetro.

No obstante, hay bastantes inconvenientes que debes tener en cuenta:

- La ventilación es imprescindible para evitar la concentración de gases, siendo necesaria una salida de humos o chimenea para la misma.

- El precio de la leña está en alza.

- No se puede mover la estufa a otras habitaciones.

- Hay que limpiar los restos de la quema cada vez que se use.

- Es indispensable contar con un espacio para almacenar la leña.

- Puede ser peligrosa si hay niños o mascotas cerca y no tienen cuidado.

-El calor no es regulable como sí puedes hacer con una caldera de gas mediante los radiadores.

Como has podido comprobar, la calefacción de leña es una opción para el invierno, si bien es cierto que no todas las casas cuentan con una chimenea o salida de humos, imprescindible para este tipo de calefacción, por lo que las calderas de gas suelen ser la opción más conveniente en estas situaciones.