Tu baño a punto: ¿cómo solucionar las averías más comunes?
Posiblemente el baño sea la habitación con más averías de tu casa. No te preocupes, de la tuya y de la de todos. Entre el lavabo, la ducha, el inodoro… son elementos que hacen que el servicio traiga más comeduras de cabeza de las que debería. Por eso hoy en el blog te ayudamos a resolver algunas de las averías de fontanería más comunes en esta estancia de la vivienda. Coge papel y boli, que empezamos:
Fugas en el grifo
No siempre es fácil ni es tan obvio averiguar que tu grifo tiene fugas, para saberlo lo primero es conocer tu consumo de agua y así poder hacer un uso más eficiente. Anota la cifra que marca tu contador del agua cuando hayas dejado de usar el grifo y al día siguiente vuelve a leerlo. Si la cifra no ha cambiado, ¡genial, no tienes fugas!, y si al contrario el número ha variado, lo más probable es que tengas una.
Hay fugas que son más evidentes, si tu grifo no para de gotear, está claro que algo no va bien ahí dentro. Una de las soluciones más sencillas y baratas es cambiar la arandela de caucho o limpiar la cal acumulada en los grifos. Muchas veces también puede ser un problema de la válvula, y lo mejor será cambiarla por unas piezas nuevas.
Inodoro atascado
A todos nos ha pasado alguna vez, la cadena se ha atascado. Si la avería se encuentra en el mecanismo de descarga, posiblemente el sonido de la cisterna se escuche continuamente, y esto se debe a que la cisterna no termina de llenarse, y por ese motivo tu cadena no funciona. También puede haber problemas con el botón, cuando el mecanismo falla, en este caso la mejor solución también será cambiarlo por piezas nuevas.
Si el atasco no es un problema de la cadena, y el agua se empieza a desbordar, es importante que no vuelvas a tirar de la cadena ya que esto lo emporará. La clave para solucionar esta avería será usar una fregona o directamente un desatascador.
El sumidero no traga bien
Cuando el agua de la ducha o del lavabo se acumula, se debe a un atasco en el sumidero y esto no le permite tragar bien el agua. Para solucionarlo, habrá que encontrar el sifón, que es una tapadera plateada que se encuentra en el suelo. Quita la tapadera del sifón y coge tu desatascador, poco a poco irán saliendo los residuos que no dejan tragar correctamente a tu sumidero y todo volverá a funcionar con normalidad.
Espero que estas soluciones tan socorridas hagan que las averías de tu baño sean algo sencillo, pero ya sabes, si la cosa se complica, nuestros expertos en fontanería acudirán a ayudarte. Además, si tu baño sufre de alguna avería de la que no hemos hablado, recuerda que en nuestro blog tenemos más consejos que te pueden ayudar a solucionarlas.