Aprende cómo medir tus ventanas correctamente en caso de reforma

Ya sea porque te estés planteando llevar a cabo una reforma en casa con tus propias manos, o porque quieras que unos profesionales de la carpintería y la cristalería te cambien las ventanas, necesitarás saber cómo se miden para solicitar presupuesto en el menor de los casos.

Aunque no sepas por dónde empezar a medir para evitar errores en cálculos y los anuncios de teletienda se empeñen en presentárnoslo como una tarea de dificultad endemoniada, no te preocupes: no es difícil en absoluto y te llevará solo un par de minutos.

.Solo necesitas tener en cuenta algunas claves que te apuntan nuestros expertos en estos gremios para no equivocarte y darle la información lo más ajustada posible a tu instalador.

bannerlocation

¿Tu ventana es estándar o fabricada a medida?

Es una pregunta muy frecuente entre neófitos de la materia. Pero la realidad es que lo más habitual en nuestro país es que las ventanas se fabriquen a medida, dado que casi todos los inmuebles tienen particularidades muy diferentes y resulta casi imposible normalizar unos formatos u otros.

Dentro de lo establecido como normal, la ventana más corriente suele rondar los 150 cm de ancho por 120 de alto.

Pero nunca puedes fiarte sin un metro en la mano.

Por lo que hazte con uno —mejor si es metálico— y acércate a tus vistas favoritas de la calle.
.

Mide de la siguiente manera: toma la anchura y la altura en tres puntos diferentes del marco (así comprobarás si existen irregularidades que hayan sido compensadas en la fabricación de la pieza).

Da siempre por buena la menor de las 3 medidas y añádele 1 cm.

Para ayudarte a comprobar posibles descuadres del conjunto, toma también la medida de la diagonal.

Así podrás asegurarte de que la ventana es totalmente simétrica y rectangular si mides la diagonal desde el lado superior derecho al inferior izquierdo y viceversa. En caso de que el resultado sea distinto, no se trata de un rectángulo perfecto y deberéis tenerlo muy en cuenta en la fabricación de la nueva ventana.

Por cierto, otra duda muy habitual es desde dónde hay que medir. Lo correcto es hacerlo desde la jamba o marco de la ventana, y no desde las extensiones que sostienen la ventana en su sitio.

Más detalles para una medición precisa de tus ventanas: ¿Hay una cubierta correspondiente a una ventana anterior, ya sea de plástico, aluminio o madera? Mide también esa superficie y añádela a las medidas, puesto que tu nueva ventana sustituirá todo ese conjunto para ajustarse mejor y ganar amplitud (y tú, entrada de luz).
.

Ahora toca medir la profundidad de tu ventana

Si no puedes abrir la ventana, mide la profundidad sobre cada lado y suma los resultados. Otra forma de medir de forma bastante aproximada es comprobar la profundidad del lado interior y multiplicándola por dos.
.

.
Sea cual sea el resultado de estas dos maneras, añádele el grosor del vidrio (que suele oscilar entre los 3mm y los 5mm, generalmente).

Ten en cuenta que, cuando hablamos de ventanas de seguridad contra tormentas u otros tipos de reemplazos, existe una medida mínima necesaria. Pero siempre y cuando tu grosor disponible sea mayor a estas medidas mínimas, no requerirás contar con una medida exacta.

¡Piensa en las manillas de la nueva ventana!

A veces no tenemos en cuenta este elemento tan importante, y terminan situadas en posiciones o alturas incómodas, o en puntos que chocan con otros elementos de tu vivienda, como muebles, paredes, electrodomésticos…

Para evitarlo, mide la altura de la pared que queda bajo la ventana (la distancia del suelo al alféizar). Esta medida se llama profesionalmente antepecho, y ayudará al fabricante a colocar la manilla a una altura cómoda para abrir y cerrar la ventana.

De la misma forma, calcula de qué manera se abre y dónde es más cómodo que coloques la manilla para que no golpee nada.

Si tienes cualquier duda, solicita que uno de nuestros cristaleros profesionales te ayude con tu reforma.